¿Qué es glaucoma?
El glaucoma es una condición en la cual la presión interna del ojo, conocida como presión intraocular, aumenta al punto de causar ojos rojos, ceguera y daño permanente. Es una causa frecuente de ceguera tanto en perros como en humanos. El glaucoma en perros debe ser diagnosticado a tiempo para poder tratarlo más efectivamente.
¿Qué causa el glaucoma en perros?
La presión dentro del ojo se mantiene gracias al balance entre la cantidad que entra y la que sale. Si hay exceso de líquido entrando o poco saliendo, el equilibrio se rompe y aumenta la presión intraocular, causando daño en la retina y el nervio óptico. Este problema a los ojos suele ser doloroso y aproximadamente el 40% los perros enfermos llegan a la ceguera.
En el caso del glaucoma primario, este ocurre debido a una predisposición genética del animal a padecer la enfermedad. Por ejemplo, el diseño del ojo puede tener poros de drenaje muy pequeños o el ángulo muy estrechos que no permite el correcto fluir del líquido ocular.
Se dice que el glaucoma es secundario si la causa es otra enfermedad. Incluso puede ser causado por un objeto que accidentalmente entre en el ojo del perro y cause una inflamación que altere el fluir del globo ocular.
¿Cuáles son los síntomas del glaucoma en perros?
Los síntomas del glaucoma primario suelen ser:
- Parpadeo del ojo constante
- Ojos rojos
- Nubosidad en el cristalino del ojo
- Pupila dilatada o que no responde a la luz
- Ceguera
- Alargamiento del globo ocular
En el caso del glaucoma secundario, los síntomas pueden ser:
- Ojos rojos
- Nubosidad en el cristalino del ojo
- Inflamación en el ojo
- Constricción de la pupila
- El iris se pega a la córnea o el lente
- Pérdida del apetito
- Dolor de cabeza
- Cambio de actitud, apatía hacia los juegos.
¿Qué puedo hacer si mi perro esta enfermo?
Los síntomas son difíciles de notar a simple vista. Esto significa que cuando sean muy evidentes, el daño al ojo es casi irreversible y el veterinario deberá realizar una operación para liberar la presión dentro del globo ocular. Esto se hace con el fin de tratar de guardar la vista del perro.
Si el glaucoma se detectó a tiempo, el veterinario podrá manejar la situación pero deberás traer tu perro para revisiones periódicas. Si el problema ocurre en un solo ojo, el veterinario revisará el ojo no afectado para determinar si ese otro ojo corre peligro o no.
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