
Dormir en cama con nuestra Mascota
Perro duerme en cama: Muchos expertos se han centrado en la costumbre muy difundida de compartir la cama con la propia mascota.
Esto hábito ve la aprobación de muchos dueños, de hecho, un estudio realizado en 23.000 personas confirmaría que la mitad de ellos suelen dormir con sus pelusitos. Los que estaìan en contras argumentan que el hecho puede no ser muy higiénico, pero un perro cuidado bien puede tranquilamente tumbarse en el edredón sin afectar a la limpieza de la casa.
Se deberìa siempre considerar como los perros y los humanos tienen diferentes biorritmos, así como los horarios de sueño y vigilia a menudo no se sobreponen.
Muchos estàn convencido que sus amigos de cuatro patas sea el mejor compañero de sueño porque, a diferencia de un compañero humano, la mayoría de las veces no tienen una respiración ruidosa y no asumen posiciones intrusivas. Por supuesto que hay excepciones, pero un perro es bastante capaz de cambiar el tamaño de su espacio para dividir el colchón.
Perro duerme en cama: podemos tener problemas educativos?
Sin duda, una vez probada la suavidad del colchón, el calor de la cama y la paz dada por recibir mimos durante la mayor parte de la noche, será difícil privar al amigo del beneficio obtenido.
Sobre todo si se está recuperando de una vida de calle, de las dificultades o el hormigón duro de la perrera. Por lo tanto, no es raro estar compitiendo con su perro para ganar la primera posición en la cama, o tratar de cerrarle fuera de la habitación por un momento de intimidad con su pareja.
Por lo general, cuanto menor sea el tamaño, más es probable dejar a su perro en su propio colchón y los porcentajes hablan por si mismos: el 76% son propietarios de Yorkshire Terrier, el 62% de Chihuahua y el 61% de Jack Russell. Sin olvidar los mestizos de diversos tamaños y las excepciones incluso de tamaño extra, como San Bernardo o el Alano.
Las opiniones se dividen entre quienes sostiene que dejar el perro debajo de las sábanas, o dejar que se acerque a la mesa sea negativo por su educación y adiestramiento, lo suficiente como para hacerle creer que el sea el componente alfa de la manada; y los que están convencidos de que mimarlos un poco los hacen más dóciles, menos agresivos y más serenos. Especialmente si el amor transforma el dolor experimentado en el pasado por el perro, ayudándole a superar las discrepancias y tensiones.