
Perro dogo mallorquin: moloso especial
El perro dogo mallorquin — también conocido como ca de bou— es una raza de perros de origen español de tipo moloso. Este perro es descendiente del alano español, introducido en las islas Baleares luego de la reconquista catalana en los años de 1230. Una vez que los alanos llegaron a las islas, se dedicaron a la cacería. Por tanto, emplearon a estos perros para guardia, caza pelea y combate con el toro. Posteriormente comenzaron a realizarse mezclas entre mastines con el dogo balear. De allí se hizo popular en las peleas entre perros y toros, ya que encajaba perfectamente para ese fin. Fue así como recibe el nombre de Ca de Bou. A principios del Siglo XX se renovó el interés por esta raza. Para el año de 1928 se inscribió el primer ejemplar del perro Dogo Mallorquín y ya en 1929 un ejemplar de esta raza fue premiado en la Exposición de Barcelona. Se considera actualmente como una raza escasa con muy pocos ejemplares fuera de Mallorca.
Perro dogo mallorquin: características
El perro Dogo Mallorquin es una raza de gran estatura. Su altura a la cruz es en promedio de unos 55 centímetros con un peso de alrededor 30 kilogramos. Se trata de un molosoide grande, con cuerpo alargado, poderosa y extremidades potentes. Existe un dimorfismo sexual muy acentuado en esta raza, específicamente en la conformación del cráneo y el tamaño. Posee una cabeza maciza, con un stop muy marcado. Sus orejas pequeñas, de implantación alta y lateral. Tiene una cola de implantación baja. El pelaje del perro Dogo Mallorquin es corto, denso y áspero, con una capa interna de pelos fina. Sus colores son variados, y varían entre atigrado oscuro, leonado intenso o negro con manchas blancas en pies, pecho y hocico y ocasionalmente máscara negra.
Perro dogo mallorquin: carácter
El perro Dogo Mallorquin fue empleado a lo largo de su existencia como un perro de protección, defensa, asistente en la caza y guardián propiedades. Actualmente es empleado como mascota. Debido a sus características, este perro requiere necesita ejercicio, paseos, ocupación para la estimulación mental y juegos. Por su alta capacidad de adaptación, son de entornos rurales y urbanos, se logran adaptar a todo tipo de viviendas. Son obedientes, fieles, equilibrados, tranquilos, pacíficos y afectuosos con sus dueños. Son perros que gustan estar entre la gente y compartir. No suelen aprender tan rápidamente como otros perros, pero con paciencia lo logran. Al tratarse de una raza dominante, es algo desconfiado ante personas desconocidas. Su férrea territorialidad los convierte en buenos guardianes. Se recomienda un buen adiestramiento canino para una óptima. El aburrimiento o la inactividad suele hacer de estos perros animales destructivos, compulsivos, nerviosos y agresivos.
Cuidados
El perro Dogo Mallorquin es un perro activo, fuerte y enérgico. Sin embargo, al igual que otros perros de gran tamaño, la displasia de cadera y la torsión gástrica pueden aparecer a lo largo de la vida de este perro. En general, este necesita pocos cuidados: el cepillado semanal junto a un baño mensual mantendrán al perro dogo mallorquín limpio y fresco. Además, la supervisión médica veterinaria periódica monitorizará la salud de este perro para prevenir enfermedades. Lo ideal es entrenarlo desde cachorro para que adquiera hábitos caninos saludables. La alimentación debe ser balanceada y rica en nutrientes, junto a una buena hidratación.
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