Perro más caro del mundo: un can digno de conocer

El perro más caro del mundo: un can digno de conocer

El perro más caro del mundo

El perro más caro del mundo es un mastín tibetano que 90 kilogramos y de mide 90 centímetros aproximadamente. En este artículo leerás algunos datos curiosos y parte de la historia de este perro sin igual.

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El perro más caro del mundo: ¿a cuánto dinero se refieren?

El perro más caro del mundo es un mastín tibetano. Un ejemplar magnifico, proveniente del continente asiático y que se ha apoderado de los gustos de los más acaudalados círculos de privilegiados en de China. Este exclusivo can se cotiza en el mercado asiático con valores que van desde los 7.000 euros.

El perro más caro del mundo fue adquirido por la no tan módica suma de 12 millones de yuanes (moneda de China) algo así como 2.000.000 millones de dólares norteamericanos. El oneroso can fue comprado por un magnate chino que pertenece al creciente y activo mundo de los bienes inmuebles.

El perro más caro del mundo: el mastín tibetano

El perro más costoso del mundo son los majestuosos mastines del Tíbet. Al parecer los chinos adinerados poseen un especial aprecio por esta raza de canes. Los criadores chinos de esta raza de perros sostienen que éstos poseen sangre de leones en sus genes. Es bien sabido en la cultura asiática china, que poseer un perro como éste asegura la prosperidad, la seguridad y el éxito en todos los ámbitos en los que sus dueños se lo propongan. Además, estos imponentes ejemplares son reconocidos por la fidelidad a sus amos y su alto sentido de la protección, ya que en los templos tibetanos son seleccionados para ser sus guardianes.

El mastín tibetano no es un perro especialmente dócil ni apacible, por el contrario es un perro con mucha energía y activo, a pesar de tener que lidiar con sus 90 kilos de peso corporal; que si bien no lo parece, pueden ser canes bastante rápidos en sus movimientos. Logran adaptarse con cierta facilidad a climas invernales, los cuales viven sin mayor problema. Sus melenas rojizas y abundante pelaje los hace la vida, en climas más inclementes bastante más fácil.

Ya en el 2011, el título del perro más caro del mundo, lo había ostentado otro mastín tibetano, llamado “Big Splash”, que también pertenece a otro magnate de origen chino. Que fue adquirido por 1,1.000.000 millones de euros.   

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